domingo, 3 de mayo de 2009

(3) Vestido - Mundo - Moda

Dentro de las ventajas que proporciona el vestido escrito se encuentra la de constituir un sentido en sí mismo, es decir, la descripción del vestido remite directamente a la Moda. Sin embargo, esta relación de sentido entre el vestido escrito y la Moda, no es una asociación sencilla. “La lingüística propone un modelo operativo del que intentaremos sacar provecho, la prueba de conmutación (…) La prueba de conmutación consiste en hacer variar de una forma artificial un término de esa estructura y observar si esa variación introduce un cambio en la lectura o en el uso de la estructura dada” (Barthes, 1967, p. 30) Esta prueba de conmutación es llevada por Barthes al sistema de la Moda. Al aplicar la prueba de conmutación en el vestido escrito, se obtendrán ciertas variaciones llamadas “clases conmutativas”.

Las clases conmutativas son muy fáciles de apreciar en el corpus del que habla Roland Barthes (1967). Por un lado está la variación concomitante que se produce entre el VESTIDO (entendido como vestimenta) y los elementos CARACTEROLÓGICOS O CIRCUNSTANCIALES. Por ejemplo: “sandalias en piel que completa con unos pinkies de raso negro. Son perfectos para un look desenfadado de mañana.” El vestido sería en tal caso sandalias en piel que completa con unos pinkies de raso negro, en tanto el carácter está explícitamente manifiesto en son perfectos para un look desenfadado de mañana.

Ahora bien, es claro que el vestido escrito puede estar en la revista sin lo caracterológico que constituye una variante concomitante (y, por ende, prueba de conmutación). Por ejemplo, en la revista pudo perfectamente aparecer sólo la descripción: sandalias en piel que completa con unos pinkies de raso negro o saco de manga francesa, etc. Barthes (1967) propone para tal caso una variante menos evidente tal vez, que corresponde a la pareja de clase conmutativa VESTIDO y MODA. Es decir un vestido puede estar escrito de manera objetiva, pero al variar un término como pinkies de raso negro por pinkies de gamuza negra puede cambiar a “PASADO DE MODA”.

En resumen, Barthes (1967) identifica dos clases conmutativas: “ya sean esos términos explícitos (Vestido función Mundo), ya sea uno explícito (vestido) y el otro implícito (Moda).” (p. 32) La primera clase conmutativa vestido-mundo es llamada CONJUNTO A, mientras la segunda clase vestido-Moda constituyen el CONJUNTO B.

¿EN ESTE SENTIDO QUÉ ES LA EQUIVALENCIA SEGÚN BARTHES?

El conjunto A establece una correlación entre el mundo y el vestido que depende de la figura que da la revista. Es decir, la revista puede plantear que sandalias en piel que completa con unos pinkies de raso negro, son perfectos para un look desenfadado de mañana o que un vestido saco con bolsillo y detalles gold son perfectos para un look desenfadado de mañana, etc. En el conjunto B aún cuando es una relación implícita como dice Barthes (1967), es más evidente la EQUIVALENCIA a la que este se refiere y también dependen de la revista, además es una equivalencia que depende netamente de la “conformidad convencional” y no de su función, o sea las sandalias en piel que completa con unos pinkies de raso negro sirven de calzado pero depende de la convención si estas “están de Moda” o no.

En base a esto mismo, los conjuntos nos permiten separar la significación de los conjuntos en: Vestido (significante material y visible) y Mundo o Moda (significado inmaterial e implícito).

2 comentarios:

  1. Está muy bueno el blog. Creo que supieron explicar muy bien el sentido del conjunto a y el b en esta entrada. Aun así no me queda claro lo de "pasado de moda" en el tercer párrafo. ¿Qué tiene que ver eso con el cambio de raso a gamuza?

    Saludos chicos a la moda!

    (Nicole Inostroza M.)

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  2. Es interesante la distinción entre elementos caracterológicos y circunstanciales en la determinación del opuesto binario de moda / pasado de moda. Aunque el fenómeno descrito no exista más que en un ámbito de atribuciones semióticas, tiene una realidad que opone resistencia a la teoría. En este sentido, ¿no será necesario corroborar la efectividad de la jerarquía planteada en la observación?

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